El camino marcado.


Acabo de ver esta ilustración, de Feminista Ilustrada, y lo primero que he pensado es que qué guay, que es justo lo que pienso y que yo sin duda soy la de la derecha. Lo segundo que he pensado es que si no puedo ser la de la derecha y coger cosas del camino de la izquierda. Lo tercero que he pensado es por qué la de la izquierda está triste. Y después me he preguntado más cosas.

No es mi postura, sino planteamientos que se me pasan por la cabeza y sobre los que he de reflexionar más.

Esta reflexión no es desde un punto de vista feminista sino generacional. Para mi generación y mi contexto (madrileña, universitaria, graduada justo en la entrada de la crisis de 2008, salarios justos y precio de la vivienda por las nubes en toda mi región, con pocas posibilidades de cambiar a otra porque aquí es donde hay trabajo) el dibujo de la derecha es casi el impuesto por la sociedad, y no el de la izquierda el que se da por defecto. Muchas parejas de mi edad querrían ahorrar para el futuro o formar una familia y no pueden porque no les cuadran los números (combinación trabajo/vivienda) con lo que, sabiendo que tal vez esto nunca será posible, ¿no es más fácil dejar de ahorrar, vivir el momento y entregarnos a viajar y a disfrutar de las posibilidades que nos da la ciudad, consumir, etc.? Y si esto lo vemos como el estilo de vida progresista y liberado, ¿no nos adormilaremos y dejaremos de intentar cambiar un sistema que no nos pone las cosas fáciles? ¿Puede ser que vivir el momento no sea la opción reaccionaria, sino la única opción? ¿No debería cabrearnos esto? ¿Es malo en realidad? ¿Cómo lo veremos de aquí a treinta años? Me parece una rueda a la que no encuentro una respuesta adecuada.

Por otro lado, ¿es feminista no tener hijos? ¿Es feminista trabajar y tener hijos? ¿Es feminista decidir quedarse en casa y cuidarlos? ¿Qué quiere decir feminista? ¿Es feminista lo que le añade calidad a la vida de la mujer, lo que equipara la mujer al hombre...? Que no haya que seguir el camino impuesto por la sociedad (el de la izquierda) no quiere decir que el de la derecha sea mejor. Lo bueno es poder elegir, combinar y construir. Y que si lo feminista es que la mujer pueda trabajar y tener hijos esto no sea a cambio de una pérdida drástica de su calidad de vida, de hacer malabares para poder combinarlo todo y de que se critique ese quererlo todo. Probablemente debamos mirar fuera, como en muchas otras cosas, para descubrir otras maneras de compaginar, y para poder decir de verdad que existe libertad y existen opciones. Más que una sociedad que no te pide que sigas uno de estos caminos, sino los dos a la vez, que abarques todo y que no te quejes porque ya eres libre.

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